

José Juan Conejo Pichardo
20 mar 2025
Análisis Político
El Tribunal Superior de Justicia de Morelos (TSJ) se ha convertido en el epicentro de una crisis sin precedentes. La mañana del miércoles 19 de marzo, una sesión extraordinaria terminó en una controversia legal y política tras la supuesta destitución del Magistrado Presidente Luis Jorge Gamboa Olea y la designación de Juan Gabriel Vargas Téllez como su sucesor. Sin embargo, lo que debía ser un proceso institucional se transformó en una batalla de poder que pone en tela de juicio la autonomía del Poder Judicial en Morelos.

Una sesión marcada por la incertidumbre y la tensión
El desarrollo de la sesión estuvo lleno de irregularidades. De acuerdo con Gamboa Olea, la reunión inició con la asistencia de 15 magistrados, alcanzando el quórum legal. Sin embargo, conforme avanzó la sesión, algunos magistrados se retiraron, dejando sin efecto la votación. A pesar de esto, un grupo de 10 magistrados decidió proceder con la remoción de Gamboa Olea y la designación de Vargas Téllez, un acto que el propio afectado calificó de "ilegal".
La controversia se intensificó con la intervención de la Fiscalía Anticorrupción, que ordenó la evacuación del personal del tribunal, permitiendo únicamente la permanencia de magistrados y secretarios. En un giro aún más inusual, la sesión fue interrumpida por la suspensión del suministro eléctrico y hasta una amenaza de bomba, lo que generó un clima de máxima tensión dentro del recinto judicial.
Las imágenes de la sesión muestran a Vargas Téllez rindiendo protesta a la luz de un teléfono celular, un detalle simbólico que refleja la “improvisación” y la falta de institucionalidad con la que se llevó a cabo su nombramiento.
Gamboa Olea ha denunciado públicamente que su destitución viola una suspensión definitiva otorgada en agosto de 2023 por la Juez Segundo de Distrito en Morelos, la cual prohibía cualquier intento de removerlo del cargo. Asimismo, enfatizó que el procedimiento careció de la mayoría requerida, pues para una destitución se necesitan al menos 15 votos, y en este caso solo participaron 10 magistrados, de los cuales uno se abstuvo.
El Magistrado también sugirió que este movimiento responde a intereses políticos ajenos al Poder Judicial, insinuando que un grupo de actores busca apoderarse del tribunal para proteger intereses particulares. En este contexto, resulta revelador que Vargas Téllez haya sido abogado del exgobernador Graco Ramírez, lo que alimenta la teoría de que esta maniobra tiene tintes políticos más que institucionales.
Por otro lado, Gamboa Olea adelantó que interpondrá denuncias ante la Fiscalía Anticorrupción por coalición de servidores públicos y usurpación de funciones, con el objetivo de revertir lo que él considera un golpe judicial.

¿Crisis judicial o golpe de estado institucional?
Este episodio refleja la fragilidad del Estado de derecho en Morelos y la falta de respeto por los procedimientos legales en el Poder Judicial. Si bien los conflictos internos son naturales en cualquier institución, la forma en que se llevó a cabo la remoción de Gamboa Olea deja más dudas que certezas.
El hecho de que la Fiscalía Anticorrupción haya intervenido con un operativo de alto nivel, la evacuación del personal y la interrupción de los servicios básicos en el tribunal, demuestra que este no fue un procedimiento ordinario, sino una acción con un trasfondo político claro.
Lo que está en juego no es solo la presidencia del TSJ, sino la independencia del Poder Judicial en Morelos. Si este tipo de maniobras se normalizan, se abre la puerta a que cualquier cargo público pueda ser removido arbitrariamente, debilitando el equilibrio de poderes y erosionando la confianza ciudadana en las instituciones.
La pregunta clave es: ¿se trata de una legítima reestructuración del tribunal o de un golpe de estado institucional disfrazado de procedimiento legal? El desenlace de este conflicto definirá el futuro del Poder Judicial en Morelos y marcará un precedente sobre el respeto a la legalidad y la autonomía de las instituciones.
¿Tú qué opinas, batalla legal o choque de intereses?, ¿Crees que esta destitución es legal o un atropello a la justicia?. Déjanos tu comentario y comparte para que más personas conozcan lo que está pasando en Morelos.